Competencia urge a Calviño a dar oxígeno a las comercializadoras eléctricas para esquivar un aluvión de cierres como en Reino Unido.
Fuente: El Mundo: VÍCTOR MARTÍNEZ / CARLOS SEGOVIA.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha activado un plan para anticiparse a la compleja crisis que atraviesa el sector eléctrico y evitar una oleada de quiebras de comercializadoras en España similar a la que está asolando Reino Unido. El organismo que dirige Cani Fernández está tremendamente preocupado ante una situación que podría reducir la competencia efectiva en el mercado con la salida de pequeñas y medianas empresas independientes ajenas a los grandes grupos eléctricos justo en el peor momento, cuando el precio del megavatio hora cotiza a precios récord.
Para frenar quiebras innecesarias vinculadas a la actual coyuntura, la CNMC ha planteado al Ministerio de Economía que dirige Nadia Calviño la posibilidad de reducir coyunturalmente las garantías financieras que las empresas eléctricas tienen que depositar en el operador del sistema para poder dar
suministro en España. Actualmente, estas garantías obligan a cubrir tres meses de comercialización, pero el problema es que los actuales precios de la energía están multiplicando su volumen económico y dejando sin liquidez a muchas de las compañías. Su plan pasa por reducirlo a un mes y que entré en marcha el próximo mes de noviembre.
«Como estamos viendo que las comercializadoras tienen dificultades para prestar garantías para plazos tan largos con los precios disparados, estamos viendo la posibilidad de adoptar una medida colaborando con el Ministerio y Red Eléctrica para intentar reducir el periodo de tres meses y que se reduzca la garantía. Les daríamos mucha más liquidez que es lo que necesitan para hacer frente a la situación que tenemos», detalla la propia presidenta de la CNMC, Cani Fernández, en conversación con EL MUNDO. La medida supone de facto oxígeno para las empresas y anticiparse a los riesgos que podría llevar una quiebra en cascada similar a la de Reino Unido, donde la crisis se ha llevado ya por delante a decenas de empresas y reducido la competencia.
Los técnicos del regulador llevan semanas analizando esta amenaza y trabajando en una solución conjunta con Red Eléctrica, que actúa como operador del sistema eléctrico en España. Estos dos entes son los encargados de pedir a Economía la inhabilitación de una compa compañía cuando detecta riesgos en la operativa por la debilidad de su solvencia financiera. Es el primer paso para frenar un fraude. En este caso, sin embargo, los problemas que afectan a las empresas no se deben a una gestión negligente de sus riesgos, sino más bien a la situación coyuntural de precios disparados en el mercado mayorista. Hoy un megavatio hora cuesta el triple que hace un año, con la media en lo que va de mes por encima de los 200 euros.
La solución planteada por la CNMC no afectaría al mercado gasista, ya que en ese caso Fernández explica que en ese caso el cruce entre garantías y demanda se hace diariamente. Eso evita el desgaste de liquidez a las empresas, y aquellas que no puedan cumplir con el aprovisionamiento acordado salen automáticamente del mercado.
La CNMC ha detectado ya dos casos de comercializadoras en quiebra y ha pedido su inhabilitación a Calviño, aunque en estos casos no se debe a la actual coyuntura de precios ya que la petición se formalizó antes del verano. Se trata de la eléctrica Inberred Solutions y la gasista CHCuatro gas. Además, la CNMC ha anunciado recientemente la incoación de 14 expedientes a distintas comercializadoras ante un presunto incumplimiento de algunas de sus distintas obligaciones legales vinculadas al depósito de las garantías.
Cuando una comercializadora eléctrica quiebra, sus clientes son traspasados a una de las denominadas comercializadoras de referencia. Estas empresas son los grandes agentes del mercado, principalmente Iberdrola, Endesa, Naturgy, Repsol y EDP. Se trata de las únicas compañías que disponen de redes reguladas de distribución y tienen la obligación legal de ofrecer a sus clientes la tarifa regulada, denominada actualmente Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC).
No obstante, hay otras compañías fuera de estos gigantes con carteras de clientes en pleno crecimiento y que esperan sacar beneficio de los actuales problemas financieros de la competencia. Es el caso de HolaLuz, que recientemente realizó una ampliación de capital por valor de 11 millones de euros, para sondear el mercado en busca de compañías con problemas financieros a las que poder comprar sus clientes.
La CNMC también está trabajando en este tema con las autoridades de Competencia autonómicas, ya que gran parte de las comercializadoras afectadas son de un tamaño tan pequeño al operar en un territorio concreto, que el supervisor nacional no dispone de información. «Estamos intentando es ser proactivos sin esperar a que nos llegue el problema y evitar situaciones como las de Reino Unido», concluye Fernández. La iniciativa de Competencia concluye con otra de Omie, la empresa encargada de gestionar el mercado mayorista de electricidad en España, que propone modificar sus reglas de funcionamiento para reducir las garantías necesarias para operar en el mercado.